martes, octubre 11, 2011

Eek en L'Escargot - Crítica y Reflexión -







Siempre es un placer actuar en L'Escargot. Nos estamos acostumbrando a ser un grupo "residente" allí y las sensaciones son cada vez mejores. Esta vez fue un día muy especial. Es el típico día que, por unas u otras razones, casi no has podido avisar a nadie del concierto y piensas que finalmente no vendrá mucha gente (muchas veces nos ha pasado). Pues bien, sí que es verdad que en muchos conciertos, desgraciadamente no podemos contar con toda la gente que nos gustaría. Entendemos que el ir de conciertos, a pesar de ser algo que se viene haciendo desde tiempos inmemoriales, a los mallorquines nos cuesta mucho. Ya puede estar la sala de conciertos debajo de casa, que si nos coge un viernes, después del curro y encima a horas intempestivas, no iremos. Por esta regla de tres, nosotros mismos no hemos acudido a multitud de conciertos que han realizado muchos de los grupos de la isla y que, a buen seguro, han sido un éxito.


Será cuestión de carácter, pereza o vaguería, no sé. Algo está fallando. Cuando viene un grupo internacional o nacional de fuera de la isla, ya sea un grupo consolidado, un grupo de moda, o unos principiantes con pintas modernas, la gente suele ir, lo cual nos alucina aún más. ¿Valoramos a nuestros grupos en su justa medida - y no nos incluyo por supuesto - ? o es que todo lo que viene de fuera, por malo que sea es mejor que lo que hay por aquí. Pues ni tanto ni tan poco, hay grupos por aquí absolutamente terribles, hay grupos buenos y hay grupos muy buenos. ¿Les estamos dando una oportunidad a los dos últimos sectores en esta isla?. Pues no. Así de claro.


A lo que iba. Parece ser que las 60 reservas de mesa y la barra a reventar nos demostraron que todas estas disquisiciones filosóficas un buen día pueden irse a tomar por el culo. Me explico, no quiero decir que toda esa gente viniera exclusivamente por acudir al show...o sí, puede que hubiera una conjunción astral y que ese día se juntaran mil historias personales que les llevaron a L'Escargot, también puede ser.


Lo importante es que os queremos agradecer el hecho de haber venido, haber hablado, habernos reido y disfrutado de unas horas con todos vosotros. Y de paso daros la lata con nuestro rollo "americano" y con la alegría con la que siempre afrontamos nuestros conciertos. Ya lo dijo un rockero una vez, "hay que tocar en cada concierto como si fuera el último que vayas a hacer en tu vida".


Esa es nuestra filosofía.